Aunque me había propuesto abandonar el nada políticamente correcto hábito de escribir sobre televisión, me veo en la obligación de llamar la atención sobre Amas de casa desesperadas en su versión latina de Univisión. Desde todo punto de vista, un quiebre en los dramatizados hispanos.
Nada de humor facilongo ni melodrama idiosincrático. Más bien lugares comunes tratados con respeto y situaciones recreadas en Miami, (refugio de expropiados), una sociedad donde el colchón de clase media permite que las franjas sociales puedan ser representadas sin tonos despectivos, (como es el caso de la telenovelas colombianas, por ejemplo). Aparte, hay un uso deliciosamente obsesivo del supermercado y del antejardín como los escenarios por excelencia donde discurre la cotidianidad del pueblo americano.
Nada de humor facilongo ni melodrama idiosincrático. Más bien lugares comunes tratados con respeto y situaciones recreadas en Miami, (refugio de expropiados), una sociedad donde el colchón de clase media permite que las franjas sociales puedan ser representadas sin tonos despectivos, (como es el caso de la telenovelas colombianas, por ejemplo). Aparte, hay un uso deliciosamente obsesivo del supermercado y del antejardín como los escenarios por excelencia donde discurre la cotidianidad del pueblo americano.
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